También os hemos hablado de otros sistemas para ablandar la mantequilla rápidamente, y que suele gustar a quienes no les agrada que el rallador quede engrasado con la mantequilla, aunque con agua caliente se lava fácilmente. Entre estos otros sistemas podemos mencionar el cortar la mantequilla en pequeños daditos, que es similar al rallado pero menos rápido, poner la mantequilla en una bolsa con cierre de cremallera y golpearla con el rodillo, lo que ayuda a descargar el estrés a algunas personas, y también se puede introducir la bolsa en agua caliente para que suba la temperatura y se ablande.
Uno de los recursos más utilizados, quizá, es el microondas, se introduce la mantequilla cortada en trocitos en un bol y se pone en marcha el pequeño electrodoméstico unos segundos, preferiblemente en la función descongelar, aun así hay que tener mucho control para que no se funda, si la mantequilla se necesita a punto pomada no debe fundirse, pues entonces se convierte en líquido.
En fin, hay muchos sistemas para que la mantequilla esté a temperatura ambiente aunque se nos haya olvidado sacarla un rato antes, por lo que no puede haber excusa para no hacer una receta porque la mantequilla esté muy fría. Cada uno puede utilizar el recurso que mejor le funcione o que más le guste, ¿o quizá necesitáis otro truco para ablandar mantequilla rápidamente?
Sea cual sea la respuesta, a continuación os dejamos con un vídeo que muestra cómo acelerar que la mantequilla esté a temperatura ambiente con un truco que no hemos comentado hasta ahora, a ver qué os parece.
Como habéis podido contemplar en el vídeo, el truco consiste en colocar la mantequilla (una porción que no debe ser demasiado grande, o en su defecto cortada en dados) en un plato y calentar un vaso con agua caliente, dejándolo reposar durante uno o dos minutos aproximadamente. De lo que se trata es de que el vaso se caliente, por lo que siempre está la opción de introducirlo en el microondas con el agua, calentarla y dejarlo en el interior, así se conservará más caliente.
Después del reposo se debe vaciar el vaso, secarlo rápidamente y colocarlo a modo de campana sobre la mantequilla, para que le transmita el calor y la empiece a ablandar. Claro, la mantequilla empezará a estar más blanda por fuera, pero no en su interior, por lo que este truco nos parece más apropiado para cuando se necesita que la mantequilla esté blanda pero no a punto de pomada, por ejemplo para untarla sobre una tostada, ¿no os parece?
Pues esperamos que este truco para ablandar ligeramente la mantequilla también os resulte útil, ya nos contaréis.
